CIENTÍFICOS PLATENSES HALLAN LA HUELLA GENÉTICA NEANDERTHAL EN LOS DIENTES ACTUALES
12 diciembre, 2024
Investigadores de la Universidad Nacional de La Plata que integran el Consortium for the Analysis of the Diversity and Evolution of Latin America, realizaron importantes hallazgos a partir del estudio de los dientes desde una perspectiva genómica en la población latinoamericana actual.
Detectaron 18 regiones genómicas asociadas a las piezas dentales analizadas, y se determinó de modo indubitable la carga genética del sistema dental humano y evidenció que en su evolución jugó un papel importante la herencia Neanderthal.
En las investigaciones sobre la evolución humana los dientes son particularmente importantes ya que en el registro fósil y arqueológico son abundantes debido a su buena preservación. Gran parte de lo que sabemos de las poblaciones humanas del pasado y otras especies hominidas fósiles se debe al estudio detallado de los dientes. Científicos del Museo de La Plata, perteneciente a la UNLP, estudiaron las bases genéticas de la morfología dental en poblaciones Latinoamericanas actuales.
Entre los hallazgos de esta investigación se detectó en estas poblaciones actuales que algunas variaciones en la forma de los dientes se relacionan con el mestizaje que hubo con Neandertales en Europa, conservando entre un 2 y 5 % de su ADN, lo cual resalta la relación cercana entre humanos y otras especies de homínidos.
El hombre de Neandertal es una especie o subespecie extinta del género Homo que apareció en el Pleistoceno medio y que habitó en Europa, Oriente Próximo y Asia Central hasta hace unos 40.000 años antes del presente, por lo cual llegaron a coexistir con los humanos anatómicamente modernos. El primer resto fósil denominado Neanderthal 1 fue descubierto en el Valle de Neander en lo que actualmente es Alemania a mediados del siglo XIX.
En la actualidad, la morfología dental se usa para reconstruir la historia y evolución de las poblaciones humanas contemporáneas. En casos donde el ADN no se puede recuperar, la forma de los dientes proporciona información clave para reconstruir diversos aspectos relacionados con la dieta, la identidad de una persona, es decir sobre su edad, sexo y patrón ancestral o mestizaje, así como las relaciones biológicas y filogenéticas, y aspectos micro y macroevolutivos.
Hasta hoy estos usos de la morfología dental en estudios evolutivos humanos se basaban en una suposición ampliamente aceptada: que la morfología dental está fuertemente influenciada por genes y representa un confiable reflejo del genotipo. Sin embargo, aquel supuesto sólo encontraba respaldo en evidencia parcial, ya que muy pocos estudios han investigado poblaciones humanas actuales y han obtenido, al mismo tiempo, datos sobre morfología dental y ADN para comprender mejor su arquitectura genética.