REGISTRAN UN EJEMPLAR DEL ÁGUILA HARPÍA

Tras 20 años sin rastro, un ejemplar juvenil de águila harpía fue avistado en la selva misionera de Argentina. Su regreso representa un hito crucial para la biodiversidad de la región y refuerza la relevancia de conservar su hábitat natural.

El descubrimiento fue resultado del trabajo de los investigadores Manuel Encabo y Sergio Moya, quienes, tras veinte años de intensa exploración, lograron fotografiar al ave. La presencia del águila, reconocida como una de las más poderosas del mundo, sugiere que los bosques de Misiones aún brindan condiciones propicias para su supervivencia.

El avistamiento del águila harpía no fue producto del azar, sino el resultado de un trabajo de investigación que se extendió por más de 20 años. Manuel Encabo y Sergio Moya, especialistas en fauna silvestre, recorrieron extensas áreas de selva en Misiones, Formosa, Salta y Jujuy, con el objetivo de documentar su presencia.

La selva misionera abarca más de 240.000 hectáreas de denso bosque, lo que hizo que rastrear al águila harpía fuera un reto colosal. Además, esta ave es conocida por su naturaleza sigilosa y su capacidad para volar entre las copas de los árboles sin ser detectada. A pesar de encontrar evidencias indirectas, como plumas y sonidos característicos, el equipo de investigadores no había logrado obtener pruebas visuales concluyentes hasta la fecha.

Para conseguir la imagen histórica del ejemplar juvenil, los científicos emplearon tecnología avanzada y metodologías de rastreo especializadas. Utilizaron cámaras de largo alcance y grabaciones de sonidos para atraer al ave, lo que finalmente permitió obtener el esperado registro. El ejemplar avistado tiene aproximadamente dos años de edad, lo que sugiere la existencia de una población activa en la región.